Los ruidos que oigo a través del tiempo,
Aquellos que no me dejan oír el murmullo de tu voz,
Quisiera aislarlos de mis pensamientos,
Pero taladran mis sientes con su persistencia.
Aquellos ruidos que me contaminan
A veces se llaman dudas, otras miedos, otras mentiras.
Y no me dejan abrir mi mente, para escucharte,
Y mucho menos mi corazón para poder amarte.
No nací con estos miedos ni inquietudes,
Aquellos que pasaron por mi vida, plantaron la semilla,
Y hoy tú, que vienes a mi vida con una sonrisa, y una esperanza
Recoges los frutos que otros dejaron en mi vida.
Lo siento amor, no puedo confiarte mi corazón,
Esta roto, dolido, dañado y en mil pedazos yace en mi pecho,
Podrías tomarte el tiempo, para enmendarlo pedazo a pedazo,
Pero mis ojos te miran con desconfianza, con miedo.
Esos ruidos, que en mi mente hacen eco,
Aquellos gritos, llantos y dolor que perduran en mis memorias,
Hoy tengo miedo de abrir mi corazón a ti.
Hoy me escondo e intento tapar mi mente, pero el eco viene de dentro.
Perdóname por no olvidar, perdóname por aferrarme y protegerme,
Porque mi corazón ha guardado el eco de tiempos pasados,
Aquellos que me hicieron daño, y me miraron con sus ojos llenos de indiferencia..
Aquellos fueron los que lanzaron el grito que rebota en mis adentros.
Ve despacio, tentando el camino, ofréceme aquello que otros no pudieron darme,
Amor, amor incondicional y pleno, conóceme cada día un poco mas,
Dame tu mano, pero no pidas nada a cambio, porque entonces mil cadenas
Me atarían a ti, y tendría que correr despavorida ante el terror de
enamorarme.
Lo siento amor, pero tengo miedo,
Y se que tu no tienes culpa alguna de los surcos que cruzan mi corazón,
Y probablemente seas ínico y especial, seguramente lo eres,
Pero yo, vivo subyugada a mi sufrimiento pasado, tan solo
Llena mi vida de sonrisas, y hazme amarte hasta los límites,
Donde nos encontremos los dos, para besarnos eternamente,
Con los ojos cerrados y sin mirar atrás, sin fantasmas, ni eco, ni pasado
esclavizador.
Ni idea del autor (a)